¿Te has ido a la cama justo después de zamparte un bocadillo de chorizo o una bolsa de patatas fritas y has sufrido pesadillas durante la noche?. ¿Comer mucho antes de dormir tiene alguna relación con las pesadillas nocturnas? Hoy voy a tratar de arrojar un poco de luz sobre el tema gracias a datos de estudios recientes.
Probablemente ya sabrás que comer antes de acostarse es una mala idea. Tu cuerpo aumenta su metabolismo y temperatura, lo que conduce a una mayor actividad cerebral durante el sueño REM (del que hablé hace unas semanas). Evidentemente a más actividad cerebral, más sueños tendrás durante la noche... ¿Pero esa actividad cerebral también significa que tendrás pesadillas? Pues parece que si:
La Universidad de Montreal realizó un estudio en el que el 9.5% de los participantes reportaron un vínculo entre comer tarde y las pesadillas. Otro estudio realizado por Journal of The Mind también reveló que irse a la cama con el estómago lleno puede causar ondas cerebrales que inducen pesadillas (7 de cada 10 participantes que comieron helado y barritas de caramelo antes de dormir sufrieron pesadillas).
Así que ya sabes, si quieres evitar las pesadillas además de comprar un buen colchón, debes evitar cenar demasiado tarde.