El compañero de cama que nunca te abandona

Aunque no tengas pareja, en realidad nunca duermes solo. Durante todas las noches y todas las siestas duermes acompañado de miles o millones de esos bichitos llamados ácaros, que aunque no veas... están ahí.

¿Qué puedes hacer para combatirlos?

No hacer la cama es una buena idea. Esta solución además ser una excusa ideal para los más vagos, también es efectiva, ya que a los ácaros les gusta mucho la humedad, así que cuando dejas la cama sin hacer y ventilas la habitación consigues que la mayor parte de ellos mueran. El principal problema de este exterminio es que los esqueletos de los ácaros fallecidos permanecerán en nuestras sábanas y colchón.

Otra buena idea para combatir los ácaros es cambiar las sábanas todas las semanas, pero aún así sobrevivirán los que habitan el colchón (que son la mayoría). Por este motivo, es aconsejable desinfectar la cama al menos una vez al mes, bien con productos especializados que puedes encontrar en el supermercado, o bien utilizando desinfectantes naturales que puedes crear tu mismo con un montón de “recetas” que hay en internet (Las hay para todos los gustos, con bicarbonato, vinagre, tomillo...).  

Para las personas alérgicas es muy importante seguir estos consejos, ya que los ácaros, polvo y suciedad pueden agravar sus síntomas.

Por último, un consejo infalible para acabar con TODOS los ácaros es cambiar tu viejo colchón por uno nuevo. Aunque después de 10 años lo veas impecable, puedes estar seguro de que está repleto de ácaros vivos y muertos.

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